Un extracto de mi reseña para la web masteatro.com. Al completo en el siguiente link:

» …  Hay textos a los que llamo fluidos, a otros, humaredas y a este, firmado por Michael Frayn que se mueve como un elefante descomunal, con peso y paso peturbado y perturbador camino de su cementario, lo bautizo como testamento. Más de cinco son los sentidos que se han de desplegar en primera línea de batalla como espectador para seguir y aprehender, no sólo los listados complejísimos a bote pronto de cifras, datos, personajes, fechas, horas, días… es decir, fragmentos históricos en formato enciclopédico cuyos contenidos evocan una clase magistral universitaria, a pesar de que la dama en escena suplique ese “lenguaje sencillo” a modo de motete- sino para que hagamos un zoom sobre entrecejos, muecas, medias sonrisas -agrias, agriadas y agridulces-, miradas de soslayo, de conmiseración y, sobre todo, miradas hacia la catástrofe la cual, como bien sabemos, está en manos del hombre, puesto que las provocadas por la madre naturaleza son parte de un planeta vivo, mientras que las ideadas por la física, la química y el poder son parte de la soberbia/hybris al final siempre castigada.»

Crítica de “Copenhague” de Michael Frayn